Ola de calor. Está claro que yo podría hacer la prueba de los 100 km en el Sáhara. Me he estado informado en artículos en la red de cómo afrontar los entrenamientos con este calor, pero no sirven de nada y es que mi cuerpo no se adapta. Tengo la esperanza que de aquí a finales de Julio vaya cambiando un poco mi capacidad de amoldarme. Ayer a las 19:30h en el punto de encuentro había 7 compañeros de entrenamiento, y es que en estos tiempos que corren es difícil concéntrarnos. Nada más empezar a entrenar y en el primer kilómetro mis pulsaciones se pusieron a 170, llegado a un máximo de 180. El ritmo estuvo casi todo el rato por encima de 6 min/km. Normalmente siempre voy acompañando a Miguel; él se adapta muy bien al calor y el pobre tiene que hacer más recorrido bordeando arboles, para no perderme de vista. Antes de empezar a entrenar estuvimos de charla con el tema del partido contra Paraguay, y es que Ninfa y Leiza son Paraguayas y como es normal defienden lo suyo, pero todo siempre dentro del buen rollo. | 
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