domingo, 25 de septiembre de 2011

Madrid corre por Madrid

Hoy a las 8:30 de la mañana antes de la carrera teníamos visita obligada a la famosa papelera de Román, yo estaba nerviosa por ver semejante monumento al mobiliario urbano del parque del Retiro; nos fuimos congregando a su alrededor gente de Zapatillas & Calcetines, Pradolongueros  y Gacelas de Madrid. Saludos, presentaciones etc. y por fin el gran momentazo: foto con el monumento “la papelera de Román”.
Punto de encuentro
En esta carrera cualquier planteamiento de bajar marca es un absurdo, hasta que no pasa el kilometro tres no empiezas a tener espacio para correr medianamente bien, aunque pensándolo bien  no hemos podido correr con total libertad en toda la carrera. A esta carrera le salva la libertad que supone poder correr por los sitios más emblemáticos de la ciudad, que es precisamente por lo que la  he vuelto a hacer este año ya que odio las carreras masificadas.
Debido a mi catarro no he apretado mucho, me he dejado llevar por el ritmo que marcaba Ana y de esta manera he disfrutado más de la carrera. El cambio del recorrido de este año me ha resultado más atractivo y menos duro que tener que subir Alfonso XII, cómo se nota que el organizador de esta carrera tiene línea directa con el faraón de esta ciudad.
Al final de carrera
Al final de la carrera nos hemos vuelto a encontrar todos en la papelera aunque esta pobre había perdido su atractivo de primera hora y estaba hasta los topes de basura; hemos intercambiado las sensaciones que nos ha dejado a cada uno la carrera y todo el mundo parecía satisfecho, menos Almudena, que parece que su lesión no le deja de dar guerra y eso que se ha portado muy bien, por más que le hemos insistido con el dorsal que sobraba ella lo ha rechazado y seguro que le ha costado mucho decir que no.

Maura feliz como una perdiz

Ahora llega el momento de la novata Maura, hoy ha hecho su primera carrera en 10.000 m, se ha portado fenomenal, lo ha hecho en 66’. Cuando uno entrena, al final se consigue obtener los frutos del sacrificio.

domingo, 11 de septiembre de 2011

VIII Senda de los frailes

Mi segunda intervención en esta carrera tan singular debido al entorno por el que discurre.
Externo de camiseta Zapatilla & Calcetines
Es una carrera que resulta dura en parte por el calor que se pasa en la primera mitad del recorrido, ya que no  hay sombras en la que refugiarse, con una temperatura cercana a los 30 grados,  cuestas que hacen que esta parte de la carrera sea insufrible, además hay unos tramos muy pedregosos. Es un Cross y como yo participo con zapatilla de correr sufro las piedras y los amagos de torcedura en  varias ocasiones, pero voy a dejar de hablar de lo dura que es para explicar que tanta dureza tiene un premio, en el momento que llegas a lo alto de las hoces, es un paisaje espectacular que bien merece sufrir esa primera parte.
Las hoces y el convento
Fui con Ana, Emilio2, Miguel y Ninfa, esta ultima nos dio un alegría la de ganar en la categoría femenina absoluta.


 Cuando llegamos al pueblo Sebulcor y después de haber recogido nuestros dorsales con camiseta incluida, calentamos un poco por sus calles, una vez ubicados en meta yo anime a Ninfa que se pusiese en primera línea de salida y buscamos a sus posibles rivales, en el caso femenino es fácil saber quién puede ser una corredora de las buenas, una vez fichadas ya le dije que no las perdiera de vista, al parecer lo hizo muy bien ya que gano. Quiero hacer una mención a la chica que sufrió un desvanecimiento, por la dureza de la carrera y tuvo que ser trasladada al centro médico más cercano, espero que no fuese nada.
Entrega de premios 
Yo fui acompañando a Ana y Miguel que sufrieron mucho, la primera tiene un catarro que la perjudico mucho toda la carrera por qué no la dejaba respirar, al terminar la empezó a dar fiebre, Miguel tenía dolores lumbares, viene arrastrando una lesión desde hace casi un año y no termina de salir, ahora se le complica con esto, pero los dos pudieron acabar la carrera, lo que no haga la pasión que sentimos por este deporte.
Yo aguante el primer tramo con ellos,  aunque no fui muy buena compañera, me sentía muy bien físicamente y tenía ganas de correr, al final me pudieron mas las ganas de correr que el compañerismos, empecé a ir subiendo el ritmo mientras me marcaba retos personales como… tengo que alcanzar aquellos, luego a los siguientes etc. Lo gratificante que tiene empezar de menos a más es ir adelantando a participantes que antes me adelantaron a mí.
En meta estaba Emilio2, dispuesto a sacarnos una foto a los compañeros de fatigas, la mía no la puedo poner,  el momento lo inmortalizo cortándome la cabeza en la foto, de todas formas valoro la intención.
Bandeja para reponer fuerzas
Al finalizar nos dieron dos bandejitas con comida y dos bebidas por participante, con la buena noche que se quedo,  pudimos disfrutar de la cena contando las batallitas de la carrera, aunque la pobre Ana aguanto sentada en un bordillo deseando irse para poder meterse en la cama calentita y lidiar con la fiebre que tenia.