lunes, 14 de noviembre de 2011

47 edición Behobia

Puedo  decir que acaba de terminar un magnífico fin de semana rodeada de un grupo de estupendas personas, casi todas con una afición en común: correr.
El viernes, sobre la 17:30h llegamos a San Sebastián, un poco de reposo en el hotel para recuperarnos del viaje, como a las 19:00h nos fuimos a buscar a Manuel y Ana, su mujer, pero a quien realmente queríamos ver es a su retoñito Vera, una bebé de 9 meses preciosa y buenísima.
Salimos a pasear por la playa de la Concha y sin darnos cuenta, y dejándonos  llevar por la belleza de esa ciudad, estábamos en la otra punta (Monte Urgull)
Al día siguiente quedada con más gente el grupo, saludamos  a Jose y a su familia y más tarde ya se unió al grupo inicial del viernes, Héctor. Nos fuimos al Kursaal para recoger los dorsales, esta tarea la terminamos enseguida y nos quedaba todo el día por delante para turistear por San Sebastián. Ana fue quién hizo de guía turística, armada con un plano nos enseñó las cosas más singulares de la ciudad, incluso la típica “Vieja’l visillo”.
Después de una buena pateada mañanera nos merecíamos parar, la forma que elegimos para reponer fuerzas es la que utilizan los lugareños; Txacoli y pinchitos, muy rico todo.
No dirigimos hacia la playa de la Concha y tuvimos muy buena suerte porque nos hizo un fin de semana fantástico, pudimos aprovechar para bajar a la playa, mojarnos los pies y sentarnos un breve instante en la arena para disfrutar del paisaje.
Playa de la Concha
Cerramos ese día con una cena rodeada de gente conocida a través del Facebook. Estuvo muy bien.
Grupo Zapatilla & Calcetines


Antes de...
Ahora llega el momento de la carrera; suena el despertador a las 7, todas las cosas preparadas de la noche anterior facilitan que estemos antes de lo previsto en el punto de encuentro, las mariposas revoloteando en el estómago, nos dirigimos hacia la Behobia en la lata de sardinas (euskotren), fueron los 20’ peores de todo el fin de semana.
Una vez en la Behobia el tiempo de espera se hacía interminable. Por fin llegó nuestro turno, la música de fondo: “El final de la cuenta atrás “de Europe, fue muy emocionante, los pelos como escarpias y con ganas de llorar.
Encarrilando la subid Gaintxurizketa
Voy acompañada de Ana y Jose, como Alfon me aconsejó antes de la carrera nos medimos hasta terminar la primera subida dura, que se me hizo mucho menos dura de lo que me había imaginado. Los gritos de ánimo de la gente nos hacían sentir fuertes y valientes, Jose dice que va forzado y que tiremos, la última subida la hacemos Ana y yo con miradas y sonrisas cómplices sin dar tregua a ninguna aparición de desánimo por ninguna de las dos; los entrenamientos están dando su frutos.


Últimos 3 km finales, durante todo el camino han sido muy escasos los espacios sin gente animando, pero ahora  entramos como héroes de alguna hazaña victoriosa y no puedo dejar de sonreír de felicidad tres km de gloria en mi vida, me siento grande victoriosa, cada vez más deprisa arrastradas por la euforia de tan singular momento ya veo la meta, busco a Ana y en su mirada veo la misma sensación que tengo en ese momento, sprint final busco su mano para levantarla hacia el cielo de la victoria.
Vídeo de meta:

Gracias San Sebastián, por regalarnos un momento así.